viernes, 16 de noviembre de 2007

PARALELO ENTRE EL SEÑOR GRANDET Y EL NEOLIBERALISMO

PARALELO ENTRE EL SEÑOR GRANDET Y EL NEOLIBERALISMO

Eugenia Grandet es una novela del francés Honorato de Balzac; allí relata la vida de una familia de provincia y permite ver a través de sus palabras como es el pueblo donde se desarrolla la historia. El lector se traslada al interior de la misma ya que el narrador de la obra lo toma de la mano y lo conduce por las calles, los parajes del lugar, la casa de la familia, etc. Además, las escenas descritas en esta obra parecen cuadros de pintura puesto que el narrador describe todo con precisión sin permitirle al lector la posibilidad de imaginar. ’

En este texto nos vamos a centrar en dos personajes de la obra para explicar la relación que hay entre la manera de actuar de uno de los personajes y el modelo económico del neoliberalismo, el cual afecta a los pueblos que no han alcanzado un desarrollo económico competente y por lo tanto, cumplen la función de otro personaje, de quienes hablaremos a través del desarrollo del texto.

El señor Grandet o tío Grandet, como lo llamaba la gente del pueblo, es el hombre más rico de Saumur. Alrededor de este personaje gira la economía de la región, las familias con mayor capital. Este señor se caracteriza por ser alguien muy avaro, hasta en su entorno familiar; a lo largo de la obra muestra hasta donde puede llegar su ambición por el dinero y por acumular riquezas, transformándose esto en su proyecto de vida.

De la página 6 a la página 8, el narrador hace una descripción del personaje, tanto en lo físico como en lo moral y sicológico; en estas páginas, el lector^,/ construye una imagen diáfana de como es el señor Grandet.

Ahora hablaremos del segundo personaje que nos ayudará a hacer el paralelo. Nanon es la empleada del servicio de la familia Grandet. Ella es fuerte, trabajadora y sumisa, durante la obra muestra su gratitud al señor Grandet porque la acogió en su hogar, dándole techo, ropa y comida. Balzac la compara con un perro por su fidelidad y también, porque a pesar de la avaricia de su amo, lo respeta y le sirve con gran cariño, sin hacer ninguna objeción por el trato que recibe.

Como usted ha podido entrever en la información que ha obtenido en la introducción del texto, el señor Grandet encarna al modelo neoliberal, el cual es nefasto para la mayoría de la humanidad.

En la esencia de este modelo están las mismas características que Balzac le da al personaje del señor Grandet. Y Nanon (la empleada del servicio) toma el papel de los pueblos oprimidos, es decir, los países que han logrado obtener un desarrollo económico, tecnológico y científico inferior a las potencias y giran alrededor de los países ricos, obedeciendo y aguantando como perros fieles, las migajas que sus amos les ofrecen.

A continuación, analizaremos el primer apartado que se extrajo de la obra:
”... desde la ciudad había mandado a construir excelentes caminos que conducían a sus fincas, su casa y sus campos, favorablemente valorado en el catastro, pagan impuestos muy módicos” (página 5)

El señor Grandet había ocupado el puesto de burgomaestre en su región y lo utilizó para obtener beneficios propios, favoreciendo sus propiedades y cometiendo fraude pues pagaba al Estado impuestos por valor inferior al que le correspondía. De igual manera, los países que encarnan al señor Grandet abusan del poder que tienen sobre los otros países, fijando su mirada en aquellos que poseen recursos naturales para explotarlos al máximo. Un ejemplo más claro lo tenemos en el continente americano: los E.E.U.U. de América ha diseñado un plan para unir a Centroamérica con Suramérica a través de una carretera panamericana para poder explotarlas conjuntamente.

Por otra parte, las empresas norteamericanas que se encuentran dispersas a lo largo del continente, no pagan a los países donde se encuentran el valor de impuestos que les corresponden, ya que aplican la misma estrategia que usó el personaje; sin embargo, Nanon guarda silencio, es decir, los gobiernos corruptos de estos países se callan y permiten el fraude, siendo cómplices de éstas.

Con el modelo neoliberal los E.E.U.U. pretenden ir más allá que el señor Grandet, pues a través de un tratado de libre comercio pretenden no pagar arancel por el ingreso de sus productos a los demás países quedándose así con todas las ganancias sin pagarle el sueldo a la pobre Nanon. ”...la mirada del hombre que se habitúa a sacar de sus capitales un interés desmesurado adquiere inevitablemente, como la del voluntarioso jugador o del cortesano, ciertos dejos indefinibles, ciertos movimientos furtivos, ávidos, misteriosos que no escapan a sus corregionarios...” (pág. 6)

Balzac a sus personajes les hace la descripción toposográfica de acuerdo a los rasgos sicológicos y morales, aunque en este apartado no habla de manera específica de los rasgos físicos del señor Grandet, el lector se puede dar cuenta de que se están refiriendo a él y entre líneas podemos llegar a la conclusión de que la fisonomía de su cara y su mirada le permitía a las demás personas del pueblo conocer su afición por el dinero y su avaricia, pero aún así lo respetaban y lo admiraban sintiéndose orgullosos de él.

Aplicando este apartado al tema propuesto, todas las personas o ciudadanos de los diferentes países de Centro y Suramérica conocen perfectamente las características de los E.E.U.U. ya que los refleja en la forma como maneja las políticas exteriores, pero los pueblos, es decir; Nanon, lo admiran y le sirven , haciéndose los ciegos y sordos de los actos de este país, solo porque tiene dinero ”el dios terrenal”.

”... el egoísmo de un hombre acostumbrado a concentrar sus sentimientos en el goce de la avaricia...” (Pág.8). El narrador aquí nos muestra hasta donde podía ir la avaricia del señor Grandet, al poner en primer lugar las riquezas materiales que sus propios sentimientos, los cuales son desplazados en su vida. Los países ricos también concentran sus sentimientos en la avaricia, pues siempre
están ideando formas para controlar y exprimir a los países pobres sin importarles los efectos negativos que causen en dichos países; los demás sentimientos, como la ayuda humanitaria, el cuidado del planeta tierra, el perdón de las deudas externas, no existe porque están en contra del sentimiento principal (la avaricia) y además se debe mantener el curso natural que algunos piensan y es que algunos nacen para gobernar, dominar y enriquecerse, como el personaje de la obra; y otros están destinados a servir como Nanon.

”... luego , para llenar su tesoro poco menos que exhausto, resolvió talar sus bosques y explotar a fondo los árboles de sus prados...”(Pág. 10) El señor Grandet siempre estaba pensando como ampliar su capital, por este motivo tala los árboles sin detenerse a meditar en el daño ecológico que podía causar a. la región, pues los árboles representaban dinero, que no podía quedarse sin metamorfosear en este adorado dios.

Los países industrializados tampoco piensan en cuidar la naturaleza, ya que ésta representa un gran capital para las transnacionales. En los territorios donde se encuentran ubicadas estas naciones el suelo está cansado por la explotación indiscriminada que le han hecho, no obstante, no felices por el daño que han causado en sus países, ahora desean explotar al máximo, los recursos naturales de los demás países donde el capitalismo no ha causado tanta destrucción. Esto lo piensan ejecutar por medio de tratados de comercio fibre en los cuales exigen a los países donde hay biodiversidad, el aval de que sus multinacionales hagan una metamorfosis con la naturaleza transformándola en dinero, sin importar las consecuencias.

”... ese muchacho no sirve para nada, se ocupa más de los muertos que del dinero...” (Pág.44). Con esta afirmación, el señor Grandet le permite ver al lector lo poco que le interesan los sentimientos humanos y a lo que está reducida su vida pues para él es más necesario el dinero que las emociones naturales que el ser humano posee y lo hace diferente a los demás seres vivos.

Los países que ostentan el poder y los gobiernos de los países pobres persiguen en conjunto a las personas u organizaciones que sueñan con un mundo mejor y equitativo para la especie humana y los juzgan porque no rinden culto al dios terrenal; por esta razón, al igual que la afirmación de Grandet, estos hombres no sirven, por lo tanto, deben ser sacrificados para que no perviertan las almas que caminan felices por el sendero que conduce al templo del dios más justo al que le ha rendido culto el hombre ”dios dinero”.

”...quebrar es cometer la acción más deshonrosa que puede cometer un hombre...” (Pág. 44). La vida del señor Grandet, como lo hemos señalado durante el texto, es el dinero, por este motivo, dice que es la mayor deshonra quebrar; si éste hubiera caído en la desgracia de perder todas sus riquezas, su vida hubiera perdido el sentido y tal ves moriría en unos cuantos días, o imitaría a su hermano suicidándose como la opción mas fácil para salir de tal oprobio.
en la sociedad actual esta afirmación es una aseveración correcta, ya que para el hombre lo más indispensable es el dinero para poder estar inmerso en la cultura del consumo y de ostentidad.

los países pobres cargan con esta deshonra, porque no pueden ofrecer un nivel de vida apropiado a sus ciudadanos y no tienen una economía estable, ni un desarrollo vertiginoso, y los demás países los miran con desdén, de ahí que los controlan y les imponen políticas económicas, como: educativas sociales etc, que no aportan al crecimiento, sino que los conduce al detrimento y al sometimiento, como pudimos observar Honorato de Balzac, con esta obra se adelanta a los tiempos futuros, advirtiendo del peligro que representaría la nueva clase social capitalista la cual estaba surgiendo en su época en dos personajes representa casi de manera teatral lo que sucedería en el /capitalismo, y más adelante la transformación de este en el modelo neoliberal (el capitalismo despiadado).

Espero que algún día las utopías de los hombres que no ofrecen culto al dios terrenal se cumplan, y que Nanon despierte del letargo en que se encuentra, ya que esta conforme con las migajas que le da su amo para que rompa las cadenas de la esclavitud y se cumpla lo que dice Rosseau , ”el hombre a nacido libre y sin embargo por todas partes se encuentra encadenado, tal cual se cree el amo de los demás, cuando en verdad no deja de ser tal esclavo como ellos” (2000: Pág. 15), cuando el hombre se de cuenta de que dominar es esclavizarse entonces no existirán en el mundo sujetos como el señor Grandet, ni países como los que nos dominan en el mundo actual.

lunes, 27 de agosto de 2007

LOS CIEGOS NO SON UN TABÚ

ANDRES FELIPE MARIN MONTOYA, estudiante licenciatura en Lengua Castellana, Universidad de Antioquia, Medellín, Colombia

PERSONAJES: JUAN (INVIDENTE)

CARLOS (INVIDENTE)

CRISTINA (INVIDENTE)

ERIKA (INVIDENTE)

ESTUDIANTE 1

ESTUDIANTE 2

PROFESOR

DIANA (AMIGA DE JUAN)

MILENA (NOVIA DE JUAN)

PORTERO

TAXISTA

MESERO


PREAMBULO

Los invidentes son un grupo minoritario, sobre el cual la sociedad ha creado tabúes. En muchas ocasiones los ven como seres extraños que por no tener el sentido de la vista no pueden llevar una vida “normal”, de ahí que el autor de esta obra quiso derrumbar dichos mitos.

En esta obra aparecen 4 estudiantes universitarios ciegos, que tienen distintas posturas frente a la vida, y se enfrentan con valor a la sociedad, mostrando sus capacidades y dejando claro que las limitaciones solo existen en la mente de cada persona.

ESCENA 1.

Dos ciegos suben las escaleras de un pasillo largo en el que hay varias cafeterías y fotocopiadoras; a ambos lados del pasillo se encuentran mesas con estudiantes tomando café, platicando o estudiando. El corredor se encuentra lleno de gente, quienes hacen difícil la movilización.

Juan: Hay mucha gente en este pasillo (mientras camina con el bastón en su mano derecha).

Carlos: Es verdad y lo peor de todo es que nos ven y no abren paso (él va pegado del hombro de su amigo y en la mano derecha lleva su bastón).

Juan: Caminemos rápido que tengo que llegar a clase.

Carlos: Pero hay mucha gente (una persona pasa apresurada y le tumba el bastón a Carlos, él hace un gesto de disgusto y se inclina para tomar su bastón. (La persona sigue de largo sin importarle).

Juan: Sí vez? parecen más ciegos que nosotros; tienen ojos y no los utilizan.

Carlos: Ya estoy acostumbrado, pues en la ciudad y aquí dentro de la universidad hay miles de ciegos que no utilizan bastón (un estudiante llama a Juan).

Estudiante 1: hola Juan ¿cómo estás?

Juan: muy bien y ¿vos?

Estudiante 1: bien, gracias ¿hiciste el trabajo para la clase de ahora?

Juan: Claro que sí y ¿tú?

Estudiante 1: Sí también lo hice, estuvo algo complicado espero que me vaya bien.

Juan: Bueno, ahora nos vemos en clase (Juan continúa su camino con Carlos, las personas se quedan con la mirada fija en ellos como asombrados).

Carlos: Juan te invito a un café, faltan 15 minutos para la clase.

Juan: Bueno (ambos se acercan a una de las cafeterías, Juan hace la fila mientras Carlos lo espera a un lado, pide los dos cafés, paga la cuenta y la cajera le dice de cuanto es el billete que le entregó y cuanta es la devuelta. Luego le entrega un café a Juan en la mano y otro a Carlos. Se ubican a un lado de la cafetería, ninguna de las personas que los observan les indican donde hay una mesa disponible, sino que se quedan mirando inermes qué van a hacer)

Carlos: ¿Lo puedo ayudar? (dice con tono burlesco).


Juan: Si es tan amable (se ríen ambos).


Carlos: Vamos, yo lo guío hasta la jardinera y cuando lleguemos seguro nos abren campo.

Juan: No, yo también sé ir, pero no me arriesgaré, ya que puedo regar el café.

Carlos: Tienes razón, mejor tomemos el café aquí de pie.

Juan: Ya terminé.
.
Carlos: Yo también, démosle las gracias a todos los que nos ayudaron a encontrar un puesto en el que pudimos tomarnos el café de pie (se ríe, continúan el camino, cada uno lleva el bastón en su mano, llegan al final del pasillo, buscan la cesta de basura y arrojan los vasos; algunas personas que los miran ponen caras de sorpresa).

Juan: Parce, nos vemos ahora en la biblioteca que voy para clase.

Carlos: Bueno ahora hablamos (se estrechan la mano, Juan se dirige al salón; cuando llega una compañera lo saluda con un beso en la mejilla).

Diana: Hola Juan ¿qué has hecho?

Juan: No mucho, y ¿tú?

Diana: Trabajando y estudiando. Ven, ya llegó el profesor (entran al salón de clase, se sientan uno al lado del otro. El profesor inicia la clase; después de hablar por largo rato, toma la tiza y escribe en el tablero).

Juan: (en voz baja) Diana ¿Qué esta escribiendo el profesor? (Diana le dicta lo que está escrito. Al finalizar la clase Juan y Diana se van a conversar a la plazoleta Barrientos).

ESCENA 2

Una mujer invidente camina por un lugar de la universidad; un estudiante se detiene para observarla y se da cuenta que está perdida, por la expresión de su rostro y porque camina con inseguridad con un paso demasiado lento y moviendo el bastón, buscando un sitio de ubicación. De pronto se detiene meditabunda. El estudiante se acerca y le pregunta con timidez.

Estudiante 2: ¡Disculpe! ¿La puedo ayudar?

Cristina: Sí (responde casi entre los dientes y con la mirada hacia el piso).

Estudiante 2: ¿Hacia donde se dirige?

Cristina: Voy para la portería de Barranquilla.

Estudiante 2: Vamos, yo te acompaño (la toma de la mano).

Cristina: No, mejor yo lo tomo del brazo, pues de esa manera me siento más segura al caminar.

Estudiante 2: ¿Qué carrera estás estudiando?

Cristina: Psicología.

Estudiante 2: ¿No es muy difícil? Pues, sin ver.

Cristina: Sí es muy difícil. Cuando uno es ciego debe buscar siempre quien lo ayude a hacer los trabajos, y para caminar por la universidad se dificulta aún mas cuando uno está solo. Además por uno ser ciego las personas lo rechazan y no les gusta compartir con uno.

Estudiante 2: Yo los admiro mucho. Ustedes son unos verracos.

Cristina: No tienen porque admirarnos, no tenemos nada especial.

Estudiante 2: ¿Usted se siente muy triste por ser ciega?, ¿Nunca ha contemplado la idea de suicidarse? (La mira al rostro, para ver sus gestos).

Cristina: Sí, yo me mantengo muy triste, a veces me gustaría morirme o desaparecer a las personas porque me molestan. En cuanto al suicidio lo he contemplado pero no he tenido el valor de hacerlo (baja la cabeza).

Estudiante 2: A continuación hay una zanja pequeña para que ponga cuidado y estire el pie (él se detiene y pasa con precaución; ella estira su pie y cae exactamente en la zanja, en su rostro se refleja frustración).

Cristina: Si ve, por cosas como esta es que me molesta ser ciega (llegan a la portería de Barranquilla y se despiden. Cuando el estudiante da la vuelta ve a otra invidente que está ingresando hacia la universidad, piensa si le brinda ayuda, pero lo duda, porque no le gustan las personas tan pesimistas y de pronto todos los ciegos perciben las cosas de igual manera; sin embargo se decide a ayudarla, se acerca con titubeo).

Estudiante 2: Buenas tardes.

Erica: Buenas tardes ( con una sonrisa que le ilumina el rostro).

Estudiante 2: ¿La puedo ayudar?

Erica: Claro, si es tan amable. Me dirijo hacia la biblioteca (pone su mano en el brazo del joven y empiezan a caminar).

Estudiante 2: ¿Cuál es tu nombre?

Erica: Erica, y ¿el tuyo?

Estudiante 2: Gustavo.

Erica: Un placer conocerlo (extiende su mano y estrecha la del estudiante).

Estudiante: Igualmente (pausa) y que haces aquí?

Erica: Soy estudiante de contaduría y además trabajo en la Nacional de Chocolates.

Estudiante: ¿En serio? (pausa) de verdad que te admiro, es increíble que una persona con tu limitación trabaje y estudie (ella sonríe).

Erica: Las limitaciones sólo se encuentran en nuestra mente, yo sé que tengo una discapacidad sensorial, sin embargo esto no es una barrera que impida que yo tenga sueños, lleve una vida normal al igual que el vidente o cualquier persona. En ocasiones siento tristeza, pero también tengo alegrías, comparto con mis amigos, trabajo, estudio, en síntesis hago todo lo que una persona entre comillas normal hace.

Estudiante 2: Yo pensaba que ustedes se mantenían muy solitarios y tristes, aunque he conocido algunos que son muy pesimistas.

Erica: Es verdad, pero la mayoría de las personas caen en el error de etiquetar a los demás. Sin embargo lo que no comprenden es la diferencia que hay entre cada uno de ellos, pues más que ser negro, discapacitado, o indígena, es un individuo con un mundo propio. Es como si yo dijera que todas las personas videntes son insolentes, groseras e inhumanas, porque algunas de ellas se portan de esta manera. Pero no es así, hay videntes que son excelentes personas.

Estudiante 2: Llegamos a las escalas de la biblioteca.

Erica: Subamos.

Estudiante 2: Respecto a lo que me dijiste, tienes razón, eres una persona muy inteligente. Me encanta la manera como ves la vida.

Erica: Gracias (sonríe).

Estudiante 2 : Bueno Erica, espero volver a verte. Que estés muy bien.

Erica: Lo mismo usted (la deja en la puerta de la biblioteca y ella ingresa sola ).


ESCENA 3

Juan se encuentra en una jardinera de la plazoleta Barrientos con su amiga Diana, tomándose un refresco y pasando el tiempo mientras llega la hora de clase.

Diana: Juan, yo tengo algunas preguntas que hacerte, que son comprometedoras pero me da pena con vos.

Juan: Y ¿cuáles son?

Diana: No, me da pena, de verdad que si.

Juan: No seas boba, creo que en el tiempo que llevamos de amistad, te he demostrado que soy muy relajado; y no me molesta ningún tipo de pregunta respecto a mi limitación. Además si deseas saber algo, debes preguntar o te quedarás con la duda.

Diana: Juan, los invidentes ¿cómo hacen el amor? (después de hacer esta pregunta su cara se sonroja y Juan se ríe por un largo instante).

Juan: ¿Cómo crees tú que los ciegos hacen el amor?

Diana: Pues no sé.

Juan: Púes los ciegos lo hacen igual que todas las personas. Vamos a un lugar propicio y luego iniciamos el ritual de la sexualidad: Besos, caricias, abrazos. Bueno ya tú sabes qué sigue después del preámbulo.

Diana: No, lo que yo quiero saber es como saben donde está la vagina para introducir el pene.

Juan: Cuando tú estás con alguien y la persona va a tener coito contigo, ¿ella primero mira donde está y luego te penetra?

Diana: No.

Juan: Púes bueno, de igual manera sucede con nosotros, no se necesita ver, para saber donde se encuentra la vagina y además en la mayoría de las ocasiones las parejas videntes hacen el amor con la luz apagada, entonces te devuelvo la pregunta ¿cómo hacen los videntes para hacer el amor con la luz apagada? (Diana guarda silencio y se sonroja).

Juan: No obstante hay pequeñas diferencias: El ciego tiene más contacto con su pareja; púes a falta de la vista utiliza más sus manos para acariciar, mientras que el vidente aunque utiliza las caricias tiene un contacto más visual con la persona (una amiga de Diana se acerca, ambas se dan un beso en la mejilla y se saludan, Diana le presenta a la desconocida).

Diana: Juan te presento una amiga (Juan extiende su mano y estrecha la de la joven).

Juan: Mucho gusto, Juan.

MILENA: Mucho gusto, Milena.

Juan: Y usted qué estudia ?

Milena: Estudio sociología ¿y vos?

Juan: Lenguas extranjeras.

Milena: Es una buena carrera.

Juan: Si, me agrada mucho.

Milena: no te incomoda si te hago una pregunta mas o menos indiscreta ?

Juan: No, pregunta lo que quieras.

Milena: ¿A usted lo bañan o lo hace usted mismo? (Juan dibuja una sonrisa irónica).

Juan: Sí, mi madre me baña todos los días porque no tengo manos (se ríe de nuevo).

Milena: No se burle de mi, dígame por favor.

Juan: No lo estoy haciendo. Yo mismo lo hago, no se necesita ver para uno bañarse.

Milena: ¿Usted cómo hace para escoger la ropa que se va a poner?

Juan: Yo tengo la ropa organizada en el closet, y cuando me voy a vestir, toco las textura de las prendas y escojo lo que me voy a poner.

Milena: Y cómo escoge el color ?

Juan: Al comprar ropa siempre pregunto su color y me lo aprendo de memoria. Cuando me la voy a poner la identifico por la textura; de ahí que sé cuáles son los colores que llevo puestos.
(Toma el vaso de refresco y bebe un sorbo, lo pone de nuevo al lado de su pierna y mira a Milena).

Milena: Discúlpeme si lo incomodo con mis preguntas, pero es la primera vez que hablo con alguien así, y tenía mucha curiosidad por saber cómo ustedes hacían algunas cosas.

Juan: No se preocupe, no me molestan sus preguntas.

Milena: ¿ Todos los invidentes son tan abiertos como usted? (él sonríe).

Juan: Pues…. No sé. Todos somos diferentes. A algunas personas les molestan las preguntas relacionadas con su discapacidad, tal vez no la han aceptado; otras veces por tratarse de preguntas demasiado obvias. (Milena sonríe apenada).

Juan: Pero bueno! ¿Qué más deseas conocer sobre los ciegos ?

Milena: Juan: ustedes cómo hacen para subirse al bus?

Juan: Es muy simple, subimos un pié primero y después el otro (Juan se sonríe y Milena se sonroja ).

Diana: Juan: lo que deseamos saber es cómo toman el bus.

Juan: Pero Milena me preguntó “cómo” nos subíamos al bus y yo le respondí (se ríe de nuevo, toma el vaso de refresco y bebe otro sorbo).
Para tomar el bus depende de la ocasión. Le pedimos el favor a alguien, ya que en partes como avenidas es difícil. Si sabemos dónde está ubicado el paradero llegamos hasta el sitio. En ocasiones los conductores ya nos conocen y gentilmente se detienen y nos colaboran. Estos son pocos, pero que los hay los hay.

Milena: Y cómo hacen para saber el sitio dónde se deben bajar? Pues, el otro día cuando yo iba para mi casa, se subió un invidente al bus. Yo me quedé observando; cuando llegó a su destino no le solicitó ayuda a nadie, sino que se puso de pié y le pidió al conductor que lo dejara allí.

Juan: ¡ Bueno! En ocasiones necesitamos decirle al conductor o a alguien que nos diga cuando llegamos a una parte determinada; sin embargo, cuando se vuelve algo habitual nos aprendemos el sitio por los giros, los resaltos, el estado del pavimento,o cálculo de tiempo.


Milena: ¡Ustedes son unos tesos! (Juan dibuja una pequeña sonrisa). Y a vos te gusta farriar?

Juan: Claro que sí. Cuando quieras me puedes invitar a rumbear.


Diana: Juan; vamos!!! Faltan 5 minutos para entrar a clase.

Juan: Chao Milena, que estés muy bien.

Milena: Chao Juan, encantada de hablar contigo, me caíste muy bien!

Juan: Muchas gracias… acuérdate de la invitación… (Juan le entrega el vaso vacío a la amiga, para que lo arroje al cesto de basura, le pone la mano en su hombro y se van para la clase).


ESCENA 4

Juan llega con su amigo Carlos al punto de encuentro en la universidad, ya que habían quedado de ir a rumbear con Diana y Milena a quienes esperan durante 10 minutos.

Juan: ¿ Será que nos dejaron metidos? ( Juega con su bastón).

Carlos: No sé. Esperemos otro rato y nos vamos usted y yo pues las mujeres tampoco son tan indispensables para pasar un buen rato, además, ellas son quienes se lo pierden (se sonríen ambos).

Diana: Hola Juan, cómo estás?

Juan: Bien… pero se estaban como demorando!

Milena: Había mucho tráfico en la ciudad y el bus vino muy despacio.

Juan: Les presento a un amigo.

Milena: Mucho gusto, Milena.

Diana: Mucho gusto, Diana.

Carlos: Mucho gusto, Pedro (Lo dice con una sonrisa juguetona). No, mentiras, mi nombre es Carlos.

Milena: Juan, y para dónde nos vas a llevar?

Juan: Yo había pensado en irnos para Industria, es un barcito de rock que me agrada mucho.

Diana: Sí… es bueno…. Vamos!

Milena: Pues no es que me agrade mucho el rock, sin embargo hoy, haré una excepción (Juan se toma del hombro de Diana y Carlos toma a Milena, empiezan a caminar y cuando llegan al bar, piden una jirafa de cerveza y se sientan a conversar ).

Carlos: Ustedes dos tienen novio?

Milena: No, en el momento me encuentro sola.

Diana: Yo estoy charlando con alguien, pero no es nada serio.

Carlos: Y por qué? No le gustan las relaciones serias?

Diana: Sí, pero él es quién no quiere. Dice que las relaciones serias son muy aburridas

Carlos: Entonces déjelo y búsquese otra persona que llene sus aspiraciones.

Diana: No es tan fácil, lo quiero mucho.

Carlos: Hagamos un brindis (Toman los vasos de cerveza y los levantan ).

Juan: Yo quiero brindar por el buen rato que estamos pasando.

Carlos: Yo brindo porque quiero conquistar una de estas bellas mujeres. (Ellas se ríen ).

Diana: Pero ve este que tan avispado! (Carlos dibuja una sonrisa picarona, chocan los vasos y beben un sorbo).

Juan: Diana me hace el favor y me pide “ Mi Enfermedad”, de Calamaro.

Carlos: A mi me acompaña al baño, si es tan amable.

Diana: Claro que sí, vamos. ( Se levantan, Carlos la toma del hombro y se alejan).

Milena: Juan: tienes novia?

Juan: No

Milena: Y por qué no?

Juan: No sé. Tal vez porque soy algo tímido.

Milena: No te creo. De tímido no tienes nada.

Juan: No, es verdad, aunque aparente ser muy abierto, soy algo tímido. Y tu porqué estás sola, si eres tan bonita?

Milena: Y tú cómo sabes que soy bonita?

Juan: ¿ Si no te puedo ver?.¿ Era lo que querías decir, no es verdad? (Ella se sonroja).

Milena: Discúlpame si te molestó mi pregunta. Tengo curiosidad de saber, cómo hacen para identificar a alguien “bonito”.

Juan: Es muy complejo, digamos que es algo parecido a la intuición femenina. Aunque no podemos ver a la persona físicamente, percibimos su belleza a través de la voz y de su energía. Sin embargo, tú puedes pensar; muchas personas que no son atractivas tienen una hermosa voz y algunas atractivas no la tienen tan agradable. Esto es cierto, pero cuando falta el sentido de la vista, aprendemos a desarrollar esta habilidad. De ahí que los videntes no tienen por qué aprender a identificar la belleza de esta manera, por eso nunca nos entenderán. Cuando le pido a alguien que me explique cómo es un color, ninguna persona sabe hacerlo. Ellos siempre hacen relaciones con objetos de la naturaleza, pero nunca dan la explicación eficiente y concreta. No obstante lo pueden apreciar a través de la vista, de igual manera nosotros sabemos cuando alguien es atractivo, aunque explicarlo es casi imposible. Sin embargo, es importante resaltar que cada persona tiene su propio concepto de la belleza.
No te gustaría tener novio por el momento?

Milena: Sí. Hay alguien que me interesa, porque ejerce en mí algo extraño.

Juan: Y de dónde es? Qué hace?

Milena: No…. Es alguien que conocí hace poco. ( Carlos y Diana regresan).

Juan: Porqué se demoraron tanto?

Diana: Fuimos a comprar chicles ( Entrega una cajita a cada uno).

Milena: ¡ Se hubieran demorado más!

Carlos: Si quieren nos vamos.

Juan: Mejor pidamos la otra jirafa. (Llaman al mesero y hacen el pedido. Luego se entabla una conversación por parejas )

Juan: Esta noche me gustaría hacer algo, pero me da miedo que no se dé lo que deseo (Tiene abrazada a Milena, con las yemas de sus dedos acaricia su piel con delicadeza, toca todo su rostro y su boca).

Milena: Y qué es?

Juan: No, no sé (Baja la cabeza apenado).

Milena: Te doy un consejo? (Juan asiente con su cabeza) Los miedos se deben vencer y si tú no haces la cosas que deseas, después te lamentarás, preguntándote que hubiera pasado.

Juan: Tienes toda la razón (Piensa un instante, acaricia el cabello de Milena, se empieza a acercar lentamente hasta que se encuentra con los labios de ella, se besan durante un instante. Juan coge el vaso de cerveza y se lo toma todo… pues se encuentra anonadado de este gran acto).

Diana: ( Le habla en secreto a Carlos) Juan y Milena se están besando ( Carlos se emociona al oírlo y piensa para sí, “ El que menos corre vuela, se las da de tímido y me ganó en la conquista”.

Milena : ¿Qué pasa?. Estás algo nervioso! (pausa).

Juan: No. (con voz suave) Me encuentro muy bien. (Se acerca y la besa de nuevo).

Carlos: Ey! Parce… Lamento interrumpir el momento romántico, pero es hora de irnos porque nos deja el metro.

Juan: Sí, ya es hora. Lástima porque la estaba pasando muy bien (se levantan, toman sus pertenencias y se retiran del bar.

El grupo se separa después de despedirse. Carlos le da un beso en la mejilla a las 2 mujeres, Juan un beso en la boca a Milena, aprieta sus manos, y besa a Diana en la mejilla. Los 2 hombres se van hacia la estación del metro y las 2 mujeres toman un autobús.

Diana: Milena cuando ví que te estabas besando con Juan, me sorprendí mucho.

Milena: Por qué?

Diana: Pues nunca pensé que te pudieras encarretar con un…

Milena: Con un ciego!

Diana: Pues sí. El es mi amigo, lo quiero mucho y me he dado cuenta a través de él que los invidentes son como los que nos consideramos “normales”. Pero nunca pensé que a ti te interesara una persona limitada.

Milena: Pues no sé…. Él es alguien especial. Me atrajo desde que me lo presentaste. Me gustó la forma como se proyecta a los demás y cómo ve el mundo a pesar de su discapacidad. Con él he descubierto que las limitaciones solo están en la mente.

Diana: Y si… lo que sucedió hoy, trasciende…

Milena: Púes ya veremos, aunque te confieso que me gustaría llegar a tener algo con él, sería una buena experiencia para mi vida.

Diana: Y tus padres?

Milena: No sé qué reacción irán a tomar si les digo que salgo con una persona ciega, pero no me importa, ya veremos como dialogo con ellos.

Diana: Y tus amigos qué te iran a decir?

Milena: No sé… ellos no son los que van a estar con él, además, Juan es alguien que con su manera de ser se gana el corazón de las personas.

Diana: De verdad, que si llegan a ser algo, les deseo lo mejor. Lo que debes tener presente es que cambian algunas cosas como por ejemplo: Cuando vayas a un lugar público, todas las miradas caerán sobre ti, ya que la gente es entrometida y lo ve como algo anormal que un vidente tenga una relación con un invidente. Sin embargo, si tú lo ves con normalidad, te acostumbrarás y no darás importancia a tales indiscreciones.

Milena: Puede que suceda eso… pero yo voy a estar es con él y los demás se pueden guardar sus prejuicios sociales… pero bueno amiga… me despido porque ya voy llegando (Milena se levante de la silla, da un beso en la mejilla a Diana, toca el timbre y desciende del bus.)

ESCENA 6

Juan se encuentra esperando a Milena en la universidad, para invitarla a salir, piensa para sí “Hoy cumplimos 6 meses de noviazgo, me gustaría estar con ella en la privacidad. He soñado tanto con poder transmitirle todo el amor que siento, pero no sé si es pertinente invitarla a un hotel. Me preocupa que piense que lo único que quiero es sexo. Se está tardando mucho, lleva 20 minutos de retraso. La hora de la cita era a las 6, sino llega en 10 minutos, me voy”. Suena el celular.


Juan: Aló.

Milena: Hola amor.

Juan: Hola… Porqué no has llegado?

Milena: Es que me cogió un poco la tarde, pero ya voy en camino, llegó por ahí en 10 minutos.

Juan: …Entonces ahora hablamos. (Juan piensa: Si le hago la propuesta y dice que no, esperaré. La quiero mucho y no la voy a presionar. Claro que me gustaría más si las cosas se dieran sin tener que proponérselo)
Juan tiene su mirada fija en un solo punto, se encuentra pensativo. Milena llega y le da un beso desprevenidamente.

Milena: Hola amor, ¿cómo estás? (Se sienta a su lado y él la abraza por la cintura).

Juan: Bien ¿y tu?

Milena: Bien (pausa) ¿Usted por qué se deja besar sin saber quién es?

Juan: Ya sabía que eras tu. Te reconozco inmediatamente porque eres alguien muy importante para mi. (Ella se acerca y él le da un beso).

Milena: Tu eres muy lindo, te quiero mucho (Ambos se quedan conversando durante una hora).

ESCENA 7

Por un instante el escenario queda a media luz.

Juan: Para dónde nos vamos?

Milena: No sé, dime tú.

Juan: Pues… a mí me gustaría ir a un lugar donde estemos solos y nadie nos interrumpa.

(Ella guarda silencio y piensa: “Será que le digo que si, él me gusta mucho. Pero me da miedo que se vaya. Si es como la mayoría de los hombres que apenas están con uno, se van?”.

Juan: Qué piensas de mi propuesta. Acaso no quieres? Te veo muy silenciosa.

Milena: Yo si quiero pero…

Juan: Pero qué… por qué lo dudas tanto. Si no quieres, no hay problema; yo espero hasta que te sientas segura.

Milena: Bueno, vamos.

Juan: Amor, pero estás segura de que lo deseas tanto como yo? Porque si es solo por complacerme, lo mejor es dejarlo para otra ocasión.

Milena: Si, estoy segura. (Se levantan de la jardinera donde se encuentran sentados, caminan hacia la portería y toman un taxi).

Juan: Buenas noches, es tan amable y nos lleva al hotel Venus.

Conductor: Con mucho gusto.

Inicia la marcha del auto, Juan y Milena se van conversando y dándose besos. El conductor sorprendido mira por el espejo en repetidas ocasiones. Cuando llegan al hotel, el portero se acerca y abre la puerta del taxi.

Portero: Buenas noches, sean ustedes bienvenidos al hotel Venus.

Juan: Buenas noches.
Antes de bajarse del auto, Juan saca la billetera, la abre mientras le pregunta al conductor el costo de la carrera, le pregunta a su novia de cuánto es el billete que tiene en la mano y a continuación se lo entrega al conductor. Espera la devuelta, luego descienden del taxi y se dirigen a una cabaña que les señala el portero. Éste les entrega las llaves y les dice el costo. Luego caminan hacia la puerta, ingresan, cierran con seguro, intercambian varias palabras y empiezan los besos y caricias).

Juan: Amor, no sabes cuánto me había soñado este momento.

Milena: Yo también.
Lo abraza fuerte, se acuestan en la cama, la ropa se va desapareciendo lentamente hasta que los cuerpos quedan desnudos y se entregan a la pasión.

Milena : (Vistiéndose) Amor ha sido una experiencia hermosa, te quiero tanto¡

Juan : Para mi también ha sido un momento maravilloso y mágico. (Cuando se encuentran vestidos Juan la abraza con fuerza).

Milena : Tan fuerte no, me vas a triturar.

Antes de salir solicitan la cuenta, les pasan el recibo por una ventanilla que da a la cabaña. Pagan reciben el paz y salvo, lo entregan al portero y se marchan en un taxi.


ESCENA 8

El escenario se adecua para una ceremonia. Los cuatro invidentes llevan trajes elegantes.


Juan: Me había imaginado este momento toda la vida. Por fin he terminado mis estudios, ya podré buscar trabajo.

Erica: Me siento muy feliz de haber alcanzado la meta.

Cristina: Casi no terminamos. Ahora viene lo peor, conseguir empleo ( Inclina la cabeza con desánimo)

Carlos: Juan, Erica cuando termine la ceremonia nos vamos de celebración. Ya están listos los amigos que nos acompañaran. Este día será inolvidable. Frota las manos con entusiasmo)

Inicia la ceremonia de grado. Una persona da un discurso diciéndoles el compromiso que adquieren por ser egresados de la Universidad de Antioquia. Llaman a cada uno, otra persona los ayuda a subir las escalas y los guía hasta el decano para recibir el diploma. Después de que los cuatro lo reciben, posan para una foto. En sus rostros se refleja una felicidad indecible por la satisfacción de lograr lo que otros no.

LA CONSTRUCCION DEL SUJETO EXISTENCIAL EN LA OBRA EL LIBRO DE LOS AMORES RIDICULOS DE MILAN KUNDERA. "Ensayo"

LA CONSTRUCCION DEL SUJETO EXISTENCIAL EN LA OBRA
“EL LIBRO DE LOS AMORES RIDICULOS”.

AUTOR: Andrés Felipe Marín Montoya
Estudiante Licenciatura en Lengua Castellana, Universidad de Antioquia, Medellín, Colombia

El siglo XX marcó un ítem en la historia de la humanidad. El hombre realizó inventos que las generaciones pasadas nunca se alcanzaron a imaginar. El viaje a la luna en 1969 mostró la capacidad de desarrollo que el hombre había logrado; sin embargo este siglo también trajo muchas guerras y un ritmo de vida muy acelerado, lo cual condujo al hombre a reflexionar sobre las consecuencias de la guerra y la vida que se estaba llevando. En consecuencia el hombre descubrió que la vida no tenía ningún sentido, porque el progreso traía consigo destrucción y la minimización al sujeto, relegándolo a un objeto más del sistema.

Muchos escritores a principios del siglo, en sus obras literarias, predijeron los males futuros y los problemas a los que el hombre se enfrentaría. Frank Kafka en sus obras refleja el confinamiento al que serían sometidas las personas, la pérdida de la libertad, perseguidos por manos invisibles que se harían dueños de los destinos de cada quien. En el libro de Kundera, “El libro de los amores ridículos”, vemos al hombre del siglo XX enfrentado a las disyuntiva de vivir, aunque en esta obra el autor se centra en el aspecto del amor, también muestra los demás aspectos que componen al sujeto, y la pregunta constante que lo atormenta acerca de lo absurdo de la vida. Pero hay una solución a este absurdo, la risa. Nos debemos reír de aquello que es estúpido o que se escapa a nuestra comprensión. Para Milan Kundera es la mejor receta y por ello la enseña en sus obras.

La obra que he traído a colasión: “El Libro de los Amores Ridículos” para rastrear la construcción del sujeto existencial, en la primera parte nos muestra con claridad la invitación a la risa frente a lo absurdo; púes ésta nos permite burlarnos de la vida, así nos traiga graves consecuencias, ya que los seres humanos hacemos las cosas y después de ejecutarlas las evaluamos, porque mientras las estamos ejecutando es imposible saber las consecuencias que vendrán, por tener los ojos vendados frente a la realidad del presente, de ahí que debemos responder con la risa por muy difíciles que sean los acontecimientos que se nos presentan. “El hombre atraviesa el presente con los ojos vendados. Solo puede intuir y adivinar lo que de verdad está viviendo. Cuando le quitan las vendas de los ojos, puede mirar al pasado y comprobar que es lo que ha vivido y cual era su sentido”. (página 13).

La vida es incierta, no tenemos el control de ella. Hoy podemos tener el dominio de las situaciones, pero mañana se nos escapan de las manos perdiendo las riendas. Se nos desboca como un caballo brioso, y nosotros sólo nos sostenemos de las crines para no caernos y descubrimos que el destino no nos pertenece. Es de los eventos que se presentan en el camino debido a la venda que tienen nuestros ojos frente a la realidad del presente. El hombre siempre comprende la dimensión de lo acontecido cuando la venda se cae, es decir, cuando somos espectadores de la película que es nuestra vida, aunque en dicha cinta el presente y el futuro están vedados.

El hombre tiene la capacidad de jugar con la realidad, crear nuevas realidades tanto para él como para los demás y cambiarla por los eventos reales que se desarrollan en lo tangible, es decir en el mundo material. No obstante, a pesar de que podemos utilizar esta capacidad para nuestro beneficio, bien sea para protegernos del entorno o divertirnos con él, aunque no es muy positivo, tarde o temprano los eventos de la realidad se salen del control de las personas, derrumbando a la realidad ficticia; dejando a su creador sin posibilidades de hacer algo para ocultarla. En la obra de Kenzaburo Oé “Una Cuestión Personal”, el personaje central, Bird descubre que la realidad es mejor confrontarla por muy difícil que nos parezca o así atente contra nuestros sueños. En la primera parte del libro “El libro de los Amores Ridículos”, el personaje central, un maestro universitario se da cuenta de que toda las historia que ha inventado para engañar a Zatureckyi, llega a un punto que no permite que continúe la red del engaño. Por lo tanto hay una ruptura que lo lleva a descubrir que no tiene control de sus propias mentiras. Sin embargo, ante esta realidad que para él es absurda, lo único que hace es reír. No existe otro camino sino pensar que si deseamos, hacemos una comedia de nuestras desgracias, así los acontecimientos que se nos presenten pertenezca a la tragedia.

Por otra parte “El Libro de los Amores Ridículos” nos muestra la faceta del amor, un tema muy contradictorio, en el que existen muchas posturas. El amor es un sentimiento que escapa a la razón, nadie ha podido definirlo ni representarlo, cada persona lo vive y siente de manera diferente. En esta obra el autor no muestra a ningún personaje idealista, sino seres fríos, promiscuos que lo único que buscan es la satisfacción de su deseo. Estos personajes reflejan la realidad actual. En los siglos XX y XXI las personas se preguntan si el amor es eterno, o un sentimiento efímero, si la felicidad tiene sentido e incluso si en verdad este sentimiento existe. Hoy en día tanto hombres como mujeres buscan una pareja hermosa, para mostrarla ante los demás como un trofeo. Los que presentan dicha característica la utilizan para llenar un poco el vacío interno que llevan, teniendo relaciones sexuales con muchas personas. Con esta práctica su yo se pierde entre los cuerpos que cubren falsamente el dolor de vivir. “Klara me gustaba; era hermosa; yo disfrutaba de que la gente nos mirase cuando íbamos juntos”. (página 20).

Hay personas que elijen tener una sola pareja durante toda su vida; otros respetan a la que tienen por el momento. Creo que aunque ellos sienten un vacío, no es tan grande como el de aquellos que intentan llenarlo teniendo coito con varias personas. Es decir, quieren darle sentido a la vida a través del sexo, de coleccionar personas para la vejez y tener la posibilidad de mirar hacia atrás, y sentirse orgullosos de los logros amorosos de su vida. No obstante me pregunto: ¿Qué es más difícil, coleccionar personas o amar solo a la que se encuentra con nosotros?

La ventaja que tienen los que permanecen con una sola pareja, es que el reflejo de sí mismo en el otro no se distorsiona; mientras que los coleccionistas pierden su imagen porque se vuelve discontinua al no saber con quien identificarse.

El primer camino nos podría parecer absurdo. Usted podría decir: Existiendo tantas personas porque razón debemos permanecer con una, si todas ofrecen cosas distintas, tanto sensaciones como sentimientos, púes es claro que cada persona se manifiesta de diferente forma. Además no se debe reprimir el deseo que sentimos por tener varias personas. La segunda parte de la obra nos habla de Martín, un personaje dedicado a coleccionar mujeres, que generan en él un descontento perenne, porque no le ofrecen ninguna estabilidad.

Si observamos el diario vivir, cuando tenemos la oportunidad de hablar con un coleccionista de amores, podemos percibir que no hay plenitud en dicha labor. Viven como un absurdo tener intimidad con una mujer que nunca han visto en su vida. El placer que obtienen es momentáneo, después viene el vacío existencial, el deseo de vestirse y marcharse para dejar atrás la conquista e ir en busca de una nueva. De ésta manera se la pasan los coleccionistas, de vacío en vacío, para al final de sus vidas darse cuenta de la soledad de su existencia.

El segundo camino también podría parecer absurdo. Usted podría decir: No tiene ningún sentido la promiscuidad, que solamente ofrece vacío, inseguridad, riesgos y soledad. La mejor decisión es tener una sola pareja, que me ofrezca estabilidad afectiva, emocional, espiritual, la oportunidad de identificarme con alguien que me complemente y me acompañe.

Como vemos ambas posturas pueden verse absurdas, según quien las mire. De ahí que Milan Kundera nos enseña en su obra a reírnos de lo absurdo, es decir, debemos respetar el absurdo que cada persona elije en la ridiculez del amor, o mejor dicho, la ridiculez de vivir. “El erotismo no es sólo un deseo del cuerpo, sino también en la misma medida, un deseo del honor. La pareja que hemos logrado, la persona a la que le importamos, y que nos ama, es nuestro espejo, la medida de lo que somos y lo que significamos”. (Página 105).

En la vida todo tiene un final. La naturaleza lo muestra en cada proceso. Un ejemplo de ello son las cuatro estaciones: Cada una dura sólo tres meses. Dos son el equivalente al nacimiento y las otras dos a la muerte. Al hombre siempre lo ha inquietado el final de las cosas. Un día somos niños, sin darnos cuenta llegamos a la juventud, luego a la adultez y finalmente a la senitud, época a la cual ningún hombre desea llegar, ya que le teme a la pérdida de sus capacidades físicas y mentales, al acercamiento de la muerte, al dejar de existir en este mundo. “…La vida es horrible, porque todo en ella está marcado por el inevitable final…”. (Página 160)

Milan Kundera en el “Libro de los Amores Ridículos” muestra al hombre del siglo XX con todas sus inquietudes sobre la vida, sobre lo absurda que es, haciendo énfasis en el sentimiento humano llamado “Amor”, para él absurdo. De ahí el título de la obra.

Por último podríamos decir: Qué el hombre lleva los ojos vendados cuando vive el presente, sin tener la posibilidad de pensar cuando está ejecutando sus acciones. Sin embargo ante este absurdo, debemos reír, para hacer divertida la comedia de vivir.


BIBLIOGRAFÍA

KUNDERA Milan, “El libro de los amores ridículos”, Tusquets Editores, 1º edición: diciembre 1987, Argentina.